Track 2: Letra y música

Tratar de entender este barrido texto exigirá del ocasional lector algo más que una simple decisión o un tiempo mal invertido. Leerlo es adentrarse poco a poco en los atribulados pasatiempos de Felipe, con los que el tipo pretendía deslumbrar a alguna fan como la que el relato describe. Perdedores sobran, lo sabemos nosotros. He aquí una de las innumerables derrotas de nuestro autor, que quiso disfrazar de literatura. No lo consigue, obviamente. Sin embargo, y contra todos los pronósticos, la prestigiosa revista Burak se dejó entretener por quién sabe qué oculta miseria y le otorgó un espacio virtual en su página de Instagram, el 29 de enero de 2021, gesto que Marangoni –según dicen– nunca agradeció o tal vez lo hizo muy mal. En fin... El texto es breve, acaso la única ventaja que le podemos encontrar.  

 

Letra y música

 Me buscaba en su moto, esa Dax 70 japonesa. Yo me acomodaba detrás y apoyaba mi cabeza en su hombro. Llevame donde quieras, sonaba bien decirle. Ella esperaba esa frase. Y acaso yo también.

Íbamos al bar, el único en Corrientes que se jactaba de tener una rockola. Comprábamos una Pepsi y un par de fichas. Ella buscaba a Madonna, al Poder del adiós. Yo insistía con los Rollings, con Ella es tan fría. Era nuestro rito y nuestro sacrificio. Ni habíamos empezado y ya nos amenazábamos con nuestro final.

Luego, regresábamos con Jovi, en una Llamarada de gloria.

Sólo eso me queda de esas noches. A ella y a mí, los extremos nos llevaron donde quisieron, mucho antes o poco después. Apenas la recuerdo ahora. En el medio, los tiempos nos dejaron una risa y dos o tres canciones inolvidables.